La ley del karma: En estos tiempos de coronavirus debemos entender la situación que estamos pasando en el mundo como un karma mundial que la sociedad debe pagar por la forma en que el ser humano está interactuando con el planeta. Deberemos aprender que nuestro comportamiento solo se puede lavar con buenas obras o con dolor. Debemos darnos cuenta que este comportamiento del ser humano traerá consecuencias a corto y medio plazo.
El karma no es ni bueno ni malo, es acción y consecuencia. La palabra karma quiere decir acción. También la podremos entender por retribución (en Egipto se le llama la ley de la retribución). Todo ello nos llevará a un equilibrio del universo (ley de la balanza)
Debemos llevar un vida de recto sentir, recto pensar y recto obrar y cuando nos salgamos de esto aparecerá el Karma y deberemos pagar por ello. Este pago siempre se llevará conforme a los dos pilares de la Fraternidad Universal Blanca que son la justicia y la misericordia. Siempre el pago karmico se hará en base a estos dos principios.
El karma está dentro de nosotros, cuando actuamos en base al ego la acción será negativa y la consecuencia será el pago. Este pago se puede evitar con buenas obras para evitar el dolor. Cuando la que actúa es la conciencia se producirá un buen karma que podrá producirnos dinero cósmico que podremos utilizar cuando las acciones futuras sean malas por la intervención del ego.
Newton: a toda acción corresponde una reacción. El karma es una ley mecánica por lo que se le aplicar el principio de que una ley superior lava una inferior. Por lo que el karma es negociable (buenas obras o sufrimiento lavan las malas acciones)
El darma es el sendero de la buena ley. Si conseguimos despertar la conciencia estaremos por encima del ego y por lo tanto del karma y podremos caminar por el sendero de la buena ley.
Tipos de Karma
Karma individual: El sufrimiento o castigo que corresponde a cada uno de nosotros por nuestros malos hechos personales; son como letras que deben cancelarse; esto se debe pagar con sacrificio o con dolor. El que sabe negociar, sale bien librado con los Señores de la Ley. Debemos aprender a sacrificarlo todo por nada; todo bien a la humanidad es un abono a la cuenta.
Karma familiar: Cuando al seno de una familia pertenecen personas que en conjunto tienen deudas con la Ley Kármica; de manera que si todos sufren y entre ellos mismos se hacen sufrir, allí la Justicia actúa en toda la familia para hacer el cobro.
Karma colectivo: Es el castigo en masa. Ejemplo: es muy común ver barrios muy pobres situados como al borde de los ríos, lomas, etc., de pronto se presentan desbordamientos de los ríos y deslizamientos, y perecen todos, o la mayoría de las personas, viven en la miseria; esto constituye un karma colectivo.
Karma mundial: Castigo y dolor a nivel mundial; las guerras mundiales son ejemplo claro de esta clase de karma; países enteros en gran número se ven afectados por la miseria, la amargura y el dolor. En estos tiempos, la Balanza de la Justicia está desequilibrada.
Karmasaya: Son las marcas astrales debido al coito de un hombre con varias mujeres o de varios hombres con una mujer; el contacto sexual y la correspondiente energía les une en astral en una forma fluídica; el karma se une a los hombres y mujeres que han copulado, estas marcas astrales sólo se borran con la Alquimia.
Karmayoga: Con el sabio uso de las corrientes sexuales nos vamos uniendo a la divinidad (yoga = unión con Dios). La Luz Odica es aquella que encierra a la pareja, la cual permanece durante el tiempo que dura la práctica, en un círculo protector.
Karmaduro: Cuando el karma que debemos no ha sido mermado porque nunca es pagable, por la inmensa gravedad de los hechos, es un karma de acción y no se detiene. Por ejemplo, una extremada degeneración sexual, el karma es el cáncer; los cancros son enviados para aniquilarnos con el cáncer.
Katancia: Es el karma superior; está por encima de los Señores de la Gran Ley. Es la que llama al orden a los Dioses y aún a los mismos de la Gran Ley.